Buscar la luz al final del túnel no es efectivo
si donde realmente vives es un pozo.
Si te están ahogando estos golpes,
si estás sumergida entre palabras,
si tienes la mente inundada de mentiras.
Tiene los párpados tan lilas, que la han dejado ciega,
tiene el corazón tan roto, que quiere en ruinas.
Ha creído que está mal salir a bailar
y dejar que la brisa sea quien mueva tu falda.
Él prefiere que la lleve pegada,
ellas la señalan si se la levanta.
Tiene el pelo en llamas,
por eso huye de sí,de los fantasmas que otros le crearon.
'¿Y si estuviese loca?
Quizá es cierto que veo gigantes en un mundo diminuto.
¿Y si he olvidado caminar sola?
Quizá que me urgen sus abrazos porque no soy suficiente.
¿Cómo no va amarme?
Si me han educado besándome después de haber sido diluvio,
después de haber padecido montañas en mis brazos.
¿Cómo no va amarme?
Si a pesar de extremar lo que vivimos no para de decirme que me adora.
Voy darle mis alas,
dice que así vamos a rozar juntos el cielo.
Le he confundido,
le irrita que no hayamos bailado si anteriormente le había dicho que sí.
Por eso aulló, por eso me insistía, por eso se hizo ira,
pero se disculpó.
Cómo no iba a perdonarle.
Es culpa de mis marañas, no fue lo que parecía.
No debí dejar de responderle, no debí haberme marchado,
no debí cantar fuerte, no debí decidir lo que quería,
es normal que me haya golpeado.'
Sus gritos han hecho que le tenga miedo al espejo.
Sus manos han hecho que crea en las cadenas.
'Tiene razón, lo perderé todo si me alejo,
va a hacer una locura como revele mis penas.
No soy bastante, por eso se queja,
me apodera el miedo de que encuentre a alguien mejor,
yo no puedo permitir quedarme sola.
Prefiero aguantar la lava a morirme de frío.
No me importa que el precio de quererle
traiga consigo la infelicidad como castigo.
¿Pero y si ya no le quisiera?
Desisto esa idea.
Resisto, persisto, pero yo ya no existo.
He oscurecido el algodón por eso tengo pesadillas.'
Ojalá y no me lo hubiesen chivado las manchas de vino en tus escamas.
Ojalá y no te creyeses menos porque te hayan querido mal.
Ojalá no te escueza el agua ocular en las cicatrices, vida mía.
Ojalá no te lean esto en una caja fría.
Ojalá aprendas que,
que te pidan tus alas,
nunca fue amor,
sino agonía.